Recordaré cada gol que grité estando en Pedreros, de visita o en la casa pegado a la radio. Te quedaste en el Popular cuando nos fuimos a la quiebra y por ahi tambaleaban tus proyecciones como jugador para poder hacer en el extranjero a los 23 años. Después pudiste jugar en México y tus goles y festejos como el Chavo del 8 o de Chapulín quedaron para los hinchas de Atlante, de los Tigres y de Tecos. O sea, no sólo Colo Colo te quiso, sino que supiste ganarte el cariño fuera de Chile, en plenas tierras aztecas.
Lo dije en un posteo en Facebook, ¿Por qué Huaiquipán tuvo despedida, siendo que no fue un ìdolo con todas sus letras, ya que tuvo buenos momentos, pero luego no hizo más historia, y se dedicó a hablar más para la galería, en vez de demostrar que podía ser el ídolo que Colo Colo necesitaba, y yo ya no tengo más esperanzas de poder volver a verte vestir la camiseta del Albo?
Al menos entre tanta nostalgia y pena por tu retiro, me queda marcado tu gol a Palmeiras por la Copa Libertadores del 2009. Ahora ya tienes tu familia, espero que disfrutes a tu hijita que está creciendo y que siempre en cada rincón donde vayas, un hincha colocolino que se precie como tal siempre te recuerde y te agradezca por todo lo que le entregaste al Popular.
Gracias Chamagol, gracias heredero de Chamaco Valdés, gracias genuino representante, embajador y prototipo de jugador e hincha de Colo Colo. Que Dios te bendiga y por siempre, cuando ya no estés, existan otros que siempre recuerden lo que fuiste para Colo Colo y su gente.